el depósito de inercia

El depósito de inercia, es como una batería térmica, almacena energía térmica, en momentos en que esta es más económica o la estamos generando nosotros, para su uso en momentos del día de no incidencia y/o de puntas de consumo térmico.

El funcionamiento se basa en el intercambio de energía entre los diferentes circuitos de líquido. En un sistema captador de energía térmica, hay cuatro circuitos independientes (no se mezclan entre sí):

  • captador de energía térmica (placas térmicas, chimenea, caldera de pellets, …),
  • el del depósito de inercia,
  • emisor de energía para Agua Caliente Sanitaria
  • y emisor de calefacción.

    El líquido que internamente, en el depósito de inercia, almacena la energía calorífica no es agua o no sólo agua, pues debe de soportar altas temperaturas sin entrar en ebullición.

la estratificación

Internamente los depósitos de inercia están estratificados por temperatura, esto es, en su parte superior la temperatura es más alta que en la inferior. Esta es la forma que tienen de optimizar la gestión del calor, pues así aunque la temperatura media del depósito este por debajo de la que en un momento dado se pueda demandar, la parte superior del mismo sí puede disponer de esa temperatura sin la necesidad de recurrir a la generación mediante caldera en ese momento, esperando a la generación por paneles térmicos, por ejemplo.

Depósito de inercial. alvaEfficiency.es

Es por ello que cada circuito que a él se conecta, ya sean de los captadores o emisores, lo hace a una altura determinada, en función de su temperatura de funcionamiento habitual. Por ejemplo, el ACS la debemos de coger de una zona intermedia, de forma que no se capte muy caliente o fría, evitando así que el usuario esté mucho tiempo esperando a que salga caliente o la deba de mezclar con agua fría para usarla.

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